Cartón pintao

Un ex represor devenido representante de artistas menores sobrevive perturbado psíquica y económicamente entre penurias. Vientos de cambio y fantasmas.
Camaradas que parten al exterior o buscan nueva vida en Embajadas y otros destinos. Sin pena ni gloria sobrevive acompañado de una joven humilde que ve en este hombre a un compañero y la fantasía de esa familia que no tuvo. La rutina en la que viven se altera con la llegada de un simpático músico santiagueño que busca algo más que un representante. Apertura democrática. Una sociedad que clama por verdad y justicia.
La escuelita de Faimallá en Tucumán quedó lejos. sin embargo hay varias cuentas por saldar.