Yo soy Hamlet

Convocado a una audición para representar el papel del príncipe de Dinamarca, el actor se encuentra cara a cara con el director e intenta convencerlo que el papel debe ser de él. Pero la audición comienza a tomar un giro inesperado y poco a poco la realidad y la ficción se confunde en la mente del actor que relaciona su pasado y su presente con la obra que resulta ser el disparador de su verdadero ser.
Los personajes aparecen y desaparecen en su mente perturbada, confundida por el deseo de ser...o no ser.
Tal vez sea la tragedia de un hombre que no puede decidirse. O quizás sea una persona acusada de un deber que no está dispuesto a cumplir.
YO SOY HAMLET, ¿Un sueño inconcluso o una realidad perturbadora?